[29.11.2022] Núria Vilanova ha publicado un nuevo artículo de opinión en el medio español El Economista en el que nos habla de la importancia de una cooperación formal entre Latinoamérica y la Unión Europea (UE).
«¿Europa quiere liderar el nuevo sistema internacional, que antes o después se va a configurar, o solo quiere acompañar a Estados Unidos? Y, lo más importante, ¿quiere Latinoamérica acompañar a Europa en esta travesía?», plantea la presidenta. Una pregunta sobre la que reflexiona durante toda la tribuna.
Para Vilanova, «el 2023 va a ser un año que marque un antes y un después en esa definición política, social y económica con la que convivimos a nivel internacional». Por eso, es el momento oportuno para que «Europa consolide una renovada y estratégica relación con América Latina: la economía mundial del siglo XXI no se podrá construir al margen de esta región, con la que Europa y particularmente España, tiene abundantes lazos y que es clave para afrontar los problemas energéticos y alimentarios», tal y como señala.
En definitiva, la empresaria defiende que debemos aprovechar la presidencia española de la UE y «dar pasos de gigante para estrechar más unos vínculos birregionales que, aunque intensos, están aún por debajo de su potencial, y cuyo reforzamiento beneficiaría ambas partes».
Ahora bien, el nuevo planteamiento presenta una particularidad, lo que Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, denomina la «triple transición»: un proceso que une la transición ecológica y la digital, pero también incorpora la dimensión social. Y el VI Congreso Iberoamericano de CEAPI, como destaca Vilanova, «será otro escenario perfecto para que los presidentes de las compañías líderes y familias empresarias de Iberoamérica pongan en común ideas e iniciativas para tonificar este vínculo entre ambas regiones. Tendrá lugar el 31 de mayo y 1 de junio de 2023, y también abordará esta nueva fase sostenible medioambiental y social de las relaciones empresariales a ambos lados del océano en las que España puede y debe jugar un papel protagónico».