América Latina entra en el segundo trimestre de 2024 con tres grandes frentes abiertos: el electoral (habrá presidenciales en Panamá, República Dominicana y México, internas en Uruguay y campaña en Venezuela), el de la gobernabilidad centrado en la estabilidad en países como Argentina, Ecuador, Colombia y el económico por la senda del todavía bajo crecimiento de la región.
Electoralmente existen pocas incertidumbres (salvo en Venezuela) pues en Panamá, República Dominicana y México hay un claro favoritismo. No existe un mínimo común denominador en los comicios pues en unos es favorito el oficialismo (República Dominicana y México) y en otros la oposición (Panamá).
De hecho, más que la incertidumbre sobre los resultados electorales lo que más afecta a la gobernabilidad es la polarización y la alta fragmentación que entorpece la aprobación de reformas.
Según Fitch Ratings la continuidad de las políticas parece probable en la mayoría de los casos, pero las elecciones se celebrarán en un contexto de poco crecimiento, aumento de las tasas de pobreza, polarización política y riesgos de movilizaciones sociales.
Una ausencia de reformas que explica que la región crezca, pero aún de forma insuficiente.
El FMI ha rebajado al 1,9% la previsión de crecimiento económico para América Latina en 2024 porque mientras las dos mayores economías de la región, México y Brasil, crecerán más de lo previsto la proyección para Argentina reduce el promedio de Latinoamérica.
Todo apunta a que se aleja el peligro de la inflación y se busca la reactivación económica. Brasil y México, primera y segunda economía de América Latina, optaron por bajar sus tasas de referencia en el mes de marzo, argumentando los niveles moderados de inflación.
Es la sexta vez consecutiva que la potencia regional, Brasil, hace esto; pero es la primera vez, desde febrero de 2021, que México toma esta decisión, y así, junto a Suiza, se convierten en los países pioneros a nivel global en liderar un camino de recorte de tasas mientras que en Estados Unidos y Europa todavía no se sienten en un terreno inflacionario seguro para bajar los niveles del costo del dinero.
Esta misma semana ha habido varias señales de la mejora del momento económico en la región: La economía de Chile empieza a despegar y en la de Uruguay para 2024 se prevé un crecimiento de más del 3,5% El riesgo país de Ecuador volvió a una tendencia a la baja al reducirse de 1.303 (20 de marzo) puntos a 1.218 (25 de marzo) en cinco días.